África Cabanillas: «No se puede concebir un Museo de Zamora sin una pintura de Delhy Tejero»

En la tarde de ayer Africa Cabanillas Casafranca, doctora en Historia del Arte, profesora-tutora del Centro Asociado de la UNED en Sevilla y autora de la única biografía completa de la pintora toresana Delhy Tejero , ofreció una conferencia en el Museo de Zamora dentro del ciclo «Colección y Patrimonio». Antes de la disertación se presentó la obra que la familia de Delhy Tejero -en este caso la hija de su sobrino, Inés Vila- ha cedido para formar parte de la exposición permanente. Esta obra sustituye a «Mussia», expuesta en el Museo desde 1999 hasta fechas recientes y que ha sido adquirida a la familia por parte del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.

La intervención de África Cabanillas titulada «Cruce de caminos: figuración y abstracción en la obra de Delhy Tejero» incidió en esta dualidad presente en la obra de la pintora a lo largo de su vida. En concreto, relató cómo llegó Delhy a la abstracción tras visitar dos exposiciones, la confección en 1943 de su primera obra abstracta conocida y cómo esta vertiente rompedora fue ocultada por la corriente imperante: «La obra de Delhy es original y experimental como pocas en el siglo XX. En el caso de las mujeres se veía como algo negativo, ha habido una mirada prejuiciada sobre la obra de Delhy hasta hace poco», afirmó Cabanillas.

La parte central de la conferencia de Cabanillas se centró en analizar las obras «Mussia» y «Arquitectura» (la obra que abandona el Museo y la obra que llega) como paradigmas de la convivencia en el mismo cuadro de la figuración y la abstracción. La profesora resaltó la importancia del depósito realizado por la familia de la toresana: «No se puede concebir un Museo de Zamora sin una pintura de Delhy Tejero».

La obra que se va: «Mussia» (1954)

La obra «Mussia», firmada por Delhy Tejero en 1954, llegó al Museo de Zamora en 1999, tras la exposición organizada «Una muchacha y una maleta», organizada en la ciudad. Esta pieza en óleo sobre lienzo ha formado parte de la exposición permanente del museo provincial gracias a la cesión de la sobrina de la autora, María Dolores Vila. De Zamora ha salido en varias ocasiones para formar parte de otras muestras, la última para «Delhy Tejero. Geometría y misterio» en el Museo Patio Herreriano de Valladolid. La pintura ha sido adquirida por el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y se espera que pronto pueda ser contemplada en la permanente de dicho museo.

En el acto de ayer África Cabanillas expuso su teoría sobre la obra: «Bajo mi punto de vista es un autorretrato en clave, habla de si misma pero también habla de las mujeres en la pintura y eso lo hace único». La sevillana justificó esta afirmación aludiendo a la pintora y escritora Marie Bashkirtseff, famosa por la publicación de sus diarios: «Recibía el nombre familiar de Moussia y Delhy tenía una edición de los años 40 de sus diarios en su biblioteca personal».

La obra que llega: «Arquitectura» (1960)

«Arquitectura», el óleo sobre lienzo que ya se expone en la sala de Bellas Artes del Museo de Zamora en sustitución de «Mussia», es el proyecto encargado por el Club Urbis de Madrid para hacer una escalera de caracol en su sede. «La escalera iba a unir el sótano con una primera planta que nunca se llegó a construir, por lo que no fue necesaria la escalera», relato África Cabanillas. La obra, en depósito gracias a Inés Vila, «no es un boceto, es un proyecto que nunca se expuso en vida ni nunca tuvo título, podía ser una obra tridimensional pero no lo sabemos seguro», concluyó.

Incertidumbre sobre el futuro de los murales de la Fábrica de Tabacos de Sevilla

Cabanillas aprovechó el final de su intervención para exponer a los asistentes la situación actual sobre los murales que Delhy Tejero realizó para la Fábrica de Tabacos de Altadis en Sevilla y en cuya reivindicación tomó parte la profesora. Ante la próxima construcción de un complejo hotelero y comercial en la antigua fábrica por parte de un fondo de inversión, los murales han sido retirados y se encuentran depositados en el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico para ser restaurados (se adjudicó la licitación el pasado día 3 octubre de 2024 por 29.000 euros). «Hay incertidumbre acerca del futuro de los murales ya que la integración en otra instalación es compleja», afirmó la conferenciante.

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