
«VIVAN LOS QINTOS DEL AÑO 1964». Pintada de quintos sobre una puerta carretera de la calle Real de Grisuela (Zamora).
Según el doctor en Historia del Arte Fernando Figueroa-Saavedra las pintadas de quintos son una de las modalidades del graffiti rural. En algunos pueblos los mozos que iban a cumplir el servicio militar obligatorio se juntaban para celebrar una comida o una cena que “culminaba con la ejecución de una pintada conmemorativa en un lugar vistoso, elegido al azar o ya determinado por la costumbre”. En esta pintada figuraría el año, el motivo de la pintada (habitualmente el lema “vivan los quintos”) y, en ocasiones, el nombre o mote de los integrantes. “Pese a lo ilegal de la actuación, estas pintadas suelen consentirse, tanto socialmente, como por parte de los particulares afectados”, concluye Figueroa-Saavedra.
A pesar de la supresión de la “mili” en diciembre de 2001, muchos pueblos siguen celebrando los quintos como rito de paso a la mayoría de edad.

Fotografías realizadas en junio de 2020.
